Los pederastas deben ser tratados como "enfermos" y no como criminales, así lo ha afirmado el cardenal sudafricano Wilfrid Napier en una entrevista concedida a la cadena británica BBC y emitida este sábado.
El arzobispo de Durban, que también fue uno de los participantes del cónclave que eligió el miércoles por la noche al papa Francisco I, ha declarado que de acuerdo a su experiencia, la pederastia es realmente una enfermedad psicológica.
"Desde mi punto de vista la pedofilia es una enfermedad psicológica. ¿Qué hacen ustedes ante la enfermedad? Hay que intentar curarla. Si yo, como individuo normal, decido conscientemente violar la ley, debo ser castigado", ha agregado el arzobispo de 72 años, muy conocido por sus posiciones conservadoras.
Cabe recordar que Napier había sido criticado por su pasividad frente a un escándalo de curas pederastas, al negarse a expulsar a los culpables de la iglesia sudafricana a principios del 2000.
En este mismo sentido, el cardenal aseguró que conocía a dos sacerdotes, víctimas de abuso sexual en la infancia, que luego se convirtieron en pederastas.
"No me digan que esas personas son penalmente responsables al mismo título que alguien que ha elegido hacer eso", ha precisado el arzobispo durante la entrevista. "No creo que se pueda pensar que una persona merece ser castigada, cuando ella misma fue herida", ha añadido.
Sin embargo, los cometarios de Napier no han pasado desapercibidos y han recibido numerosas críticas, en especial, de víctimas de pedofilia de los miembros de la iglesia católica.
"Que sea una enfermedad, quizá, pero es también un crimen y los crímenes deben ser castigados, los delincuentes deben responder por sus acciones pasadas y presentes", ha respondido así a los comentarios de Napier, Barbara Dorries, agredida en su infancia por un cura pedófilo y miembro de un grupo de víctimas con sede en EE.UU.
"Los obispos y los cardenales han cubierto estos crímenes y han permitido que los depredadores sigan actuando, que no sean arrestados, guardaron esos actos como un secreto en la Iglesia", ha denunciado Dorries.
Durante las últimas décadas, el clero católico ha visto su imagen seriamente dañada por escándalos relacionados con casos de pederastia; cuestión que ha conmocionado a la comunidad internacional.
Este tipo de escándalos de pedofilia no es algo nuevo en la iglesia católica de diferentes países del mundo, en particular, los occidentales; delito que la mayoría de las veces ha quedado oculta bajo el silencio de los arzobispos locales y el mismo Vaticano, lo que ha causado que la gente pierda su confianza en la iglesia.
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