Pekín llamó a las autoridades de Washington a detener sus actividades de espionaje en China y adoptar acciones concretas encaminadas a desarrollar los nuevos lazos militares bilaterales.
EE.UU. "debe reducir y finalmente detener" sus misiones de espionaje en China, dijo el vicepresidente de la Comisión Militar Central (CMC) del Partido Comunista de China, Fan Changlong, durante un encuentro mantenido el martes en Pekín, capital china, con Susan Rice, asesora de Seguridad Nacional del país norteamericano.
"Esperamos que EE.UU. pueda promover el sano desarrollo de nuevos lazos militares entre Pekín y Washington con acciones concretas", agregó el alto cargo militar chino en el último día de la visita de tres días de la funcionaria estadounidense al país asiático.
Durante su estancia en China, Rice se reunió con las autoridades militares y gubernamentales, entre ellos, el presidente Xi Jinping, con quien abordó los intereses estratégicos y económicos a largo plazo de Washington y Pekín.
El viaje de la también exembajadora de EE.UU. ante las Naciones Unidas a China se realiza en vísperas de la visita del jefe de la Casa Blanca, Barack Obama, al país asiático y su participación en noviembre en la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico.
Las declaraciones de Fan Changlong hacen referencia a la operación de vigilancia que llevó a cabo el pasado 19 de agosto un avión antisubmarino de EE.UU. cerca de las islas orientales de China.
Un informe publicado a finales del mes por el portal chino ‘Global Times’, indicó que es posible que el avión-espía P-8 Poseidon de la Marina estadounidense haya dejado caer sonoboyas con el fin de obtener datos sobre los submarinos nucleares de China, desplegados en los alrededores de la isla Hainan.
De acuerdo con el documento, los pilotos chinos descubrieron el espionaje durante una patrulla habitual en la que siguen varias indicaciones estándares de intercepción vigentes para detectar aviones estadounidenses en la zona.
A mediados de agosto, Washington acusó a las Fuerzas Aéreas chinas de que un avión de combate llevó a cabo una “intercepción peligrosa” de la patrulla estadounidense en el espacio internacional al este de la costa de China.
El Gobierno de Pekín rechazó estas acusaciones y enfatizó que la maniobra realizada por el caza chino fue una respuesta a “las acciones de espionaje de gran escala y muy frecuentes” que lleva a cabo la aviación estadounidense.
Hispantv
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