La agencia espacial rusa Roskosmos ha hecho saber este miércoles que no entregará los propulsores necesarios para poner en órbita el satélite geoestacionario ucraniano Lybid hasta recibir el importe de su coste.
“Consideramos que no tiene sentido alguno suministrar equipamiento para los Zenit hasta que no efectúen el pago, por cuanto la empresa está de hecho en bancarrota y no veríamos nuestro dinero", ha declarado al diario moscovita Izvestia un alto responsable de la compañía aeroespacial, según reporta la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
El satélite Lybid (“Cisne”) debía lanzarse el pasado verano mediante el cohete Zenit. Durante meses, la empresa ucraniana encargada de montar la lanzadera, Yuzmash, ha intentado obtener sin pago previo el suministro de los motores RD-171M.
Yuzmash atraviesa una grave crisis financiera y unos 700 especialistas han abandonado la empresa durante los últimos meses.
“Por ahora, no está claro si nuestros socios ucranianos aceptarán la propuesta”, reconoce la fuente citada por Izvestia. "Si llegamos al acuerdo, el programa Dniepr funcionará", señala.
Las relaciones entre Moscú y Kiev atraviesan por momentos de tensión tras la reunificación a Rusia de la región autónoma de Crimea, separada de Ucrania el pasado 16 de marzo tras celebrar un referéndum. Esta medida se adoptó luego de innumerables protestas contra el nuevo Gobierno de Kiev.
Hispantv
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