Dos palestinos han perdido la vida y otra veintena han resultado heridos este domingo en Neguev, sur de los territorios ocupados, en un ataque de las fuerzas del régimen de Tel Aviv contra el funeral de Sami al-Jaar, joven palestino que fue asesinado la semana pasada por la policía israelí.
Sami al-Ziadana y Anwar Alafawi han muerto tras la inhalación de gases tóxicos empleados por las fuerzas de seguridad israelíes contra los participantes en el funeral, en la ciudad beduina de Rahat, cuyo número superaba los 8000.
Según los testigos, entre los heridos en los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad israelíes, se encuentra el jefe del movimiento islámico en el norte de los territorios ocupados palestinos, el sheij Raed Salah.
Durante la jornada de este domingo, los residentes de Rahat y todas las aldeas beduinas en el desierto de Neguev han protagonizado una huelga general en protesta por el asesinato de Al-Jaar.
La huelga ha paralizado el sistema escolar local y las empresas privadas en áreas beduinas en todo Neguev.
El miércoles pasado, Al-Jaar, un joven de unos 20 años, fue asesinado a tiros durante choques entre manifestantes palestinos y la policía israelí en Rahat.
Al-Jaar es el segundo ciudadano palestino en los territorios ocupados que pierde la vida por disparos de la policía en los últimos meses.
Alrededor de 260.000 beduinos viven en los territorios ocupados palestinos, mayoritariamente en Neguev, y de este número, unos 90.000 habitan en 35 aldeas no reconocidas por las autoridades israelíes y son privados de los servicios públicos.
Hispantv
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