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| El secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, visita a las tropas de la Guardia Nacional desplegadas en Washington D.C., 29 de enero de 2021. (Foto: AFP) |
El Pentágono realiza un barrido interno de ciertos grupos de asesoría política, cuyos miembros habían sido nombrados a última hora por Donald Trump.
El recién estrenado secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, ha eliminado al menos una treintena de grupos de asesoría política del Pentágono, entre los cuales se encuentra un nutrido número de personas que habían sido nombradas a última hora por la anterior Administración de Donald Trump.
“Las juntas asesoras han desempeñado y seguirán desempeñando un papel importante en la configuración de las políticas públicas [del Departamento de Defensa] pero la responsabilidad de nuestra administración requiere que evaluemos continuamente para asegurarnos de que cada comité asesor proporcione el valor apropiado”, ha explicado Lloyd, según informa este martes el diario estadounidense The Wall Street Journal (WSJ)
El medio señala en su reporte que, en las últimas semanas de la Administración del líder republicano, el que fuera entonces secretario de Defensa interino Chris C. Miller nombró a varios partidarios de Trump para que formaran parte de estas juntas, entre ellos el polémico general retirado Anthony Tata, conocido por sus incendiarias diatribas a través de Twitter.
La purga fue presagiada la semana pasada cuando Austin rubricó el sábado un memorando sobre el despido de todos los integrantes que habían sido designados desde el 16 de febrero de 2020, lo que sumaba más de una treintena de grupos de asesoría, recoge el texto informativo.
De igual modo, agrega que el máximo mando de la Defensa estadounidense ordenó suspender la operación de otras 42 juntas asesoras para que pudieran tomar asientos en sus respectivos consejos, mientras el Pentágono hace una revisión de las mismas.
Sin embargo, la decisión tomada por Austin no afecta de manera inmediata a aquellas designaciones llevadas a cabo por el Congreso de EE.UU. o por el propio Trump, pero sí a aquellas que fueron obra de los anteriores secretarios de Defensa, como Mark Esper, o de los líderes militares de las Fuerzas Armadas.
Trump antes de abandonar la Casa Blanca se propuso a recolocar en los distintos órganos a al menos un centenar de seguidores fieles a sus políticas populistas, las cuales estuvo promoviendo en sus cuatro años de mandato a fin de garantizar que su legado siguiera intacto en todas todos los estratos gubernamentales de Estados Unidos.
hispantv
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