Normalistas mexicanos atacan un cuartel militar en Chilpancingo
En México, los estudiantes de la escuela normalista de Ayotzinapa han lanzado este jueves piedras a los soldados de un cuartel militar ubicado en Chilpancingo, capital del estado de Guerrero (sur), han informado fuentes locales.
Estos enfrentamientos se producen, después de que el Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG), intercambiara en esa misma jornada a tres trabajadores de la empresa Coca Cola con varios estudiantes detenidos.
El diario mexicano Milenio ha informado que cuatro autobuses llenos de estudiantes lanzaban piedras hacia el interior del cuartel militar, mientras los soldados las devolvían.
La Policía, también, ha indicado que los manifestantes realizaron pintadas en las instalaciones policiales para mantener vivo al recuerdo de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa.
Estos enfrentamientos se producen, después de que el Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG), intercambiara en esa misma jornada a tres trabajadores de la empresa Coca Cola con varios estudiantes detenidos.
De acuerdo con los informes, en el canje destaca la figura de dos maestros normalistas que fueron detenidos hace unos meses por las fuerzas policiales de Chilpancingo.
A pesar de que el presidente interino de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Ramón Navarrete, ha hecho hincapié en que la violencia policial no es una salida pacífica para resolver el caso, las fuerzas de seguridad arrestan diariamente a varios estudiantes y maestros normalistas.
La desaparición ha provocado una profunda conmoción no solo a nivel nacional, sino internacional, y ha sacado a la luz la corrupción e ineficacia del Gobierno mexicano.
Todavía no se ha revelado ninguna información complementaria sobre los posibles heridos en los enfrentamientos de este jueves.
A finales de septiembre de 2014, un grupo de policías locales disparó contra los alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa, causando la muerte de seis; después, los agentes capturaron a 43 jóvenes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que asegura haberlos asesinado e incinerado en un basurero, aunque solo un cuerpo ha sido identificado hasta la fecha.
Hispantv
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