El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Alexander Lukashevich, ha manifestado este jueves la profunda preocupación de Moscú por el plan de Estados Unidos para suministrar armas a Ucrania en medio de los esfuerzos para alcanzar una paz permanente en este país.
“Las relaciones ruso-estadounidenses sufrirán un daño colosal si la gente de Donbás pierde la vida con armas estadounidenses”, ha aseverado Lukashevich en una rueda de prensa.
“Las relaciones ruso-estadounidenses sufrirán un daño colosal si la gente de Donbás pierde la vida con armas estadounidenses”, ha aseverado Lukashevich en una rueda de prensa.
En este contexto, ha añadido que la decisión de Estados Unidos de entregar armas a Ucrania y entrenar soldados ucranianos no sólo puede llevar a socavar la tregua y desatar una nueva ola de violencia en el sureste de Ucrania, sino que también se considera como una amenaza para la seguridad de Rusia.
El portavoz de la Diplomacia rusa ha subrayado el diálogo político entre las partes del conflicto como la única manera de salir de la crisis actual en el este de Ucrania agregando: “Es imposible extinguir el fuego de una guerra civil mediante las armas”.
El acuerdo de tregua en el este de Ucrania, conocido como Minsk II, se alcanzó en la capital bielorrusa de Minks el 12 de febrero después de que los presidentes de Rusia, Vladimir Putin; de Francia, François Hollande; de Ucrania, Petro Poroshenko; así como la canciller alemana, Angela Merkel, se comprometieron a convencer a las partes implicadas en el conflicto de Ucrania a retirar el armamento pesado de las líneas del frente.
Kiev y sus aliados occidentales han acusado a Moscú, en repetidas ocasiones, de apoyar con hombres y suministro militar a los independentistas del este de Ucrania; Rusia, por su parte, rechaza tales alegatos, diciendo que Kiev debe dejar de oprimir a la etnia rusa que vive en las zonas del este y sureste de Ucrania.
Hispantv
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