El Congreso chileno ha aprobado este miércoles la ley de gratuidad educativa para 2016, un logro en la reforma a la educación que el Gobierno de la presidenta, Michelle Bachelet, lleva adelante.
Esta medida, aprobada por la Cámara baja de Chile, significará que a partir del 2016 las universidades públicas pasarán a ser gratuitas, y esta gratuidad irá en beneficio de unos 178 000 universitarios más pobres; sin embargo, la intención de Bachelet es que, hasta el 2020, todos los estudiantes de educación superior puedan verse favorecidos, como ya prometiera hace unos días.
Las universidades privadas también podrán adherirse a este sistema, traspasando el costo de los impuestos que pagan sus estudiantes al Estado, pero también deberán cumplir requisitos como no tener fines de lucro, que tengan participación estudiantil en su directiva y estén acreditadas ante el Estado al menos cuatro años.
Hispantv
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